“... No puede haber amor donde hay explotadores y explotados. No puede haber amor donde hay oligarquías dominantes llenas de privilegios y pueblos desposeídos y miserables. Porque nunca los explotadores pudieron ser ni sentirse hermanos de sus explotados y ninguna oligarquía pudo darse con ningún pueblo el abrazo sincero de la fraternidad. 
El día del amor y de la paz llegará cuando la justicia barra de la faz de la tierra a la raza de los explotadores y de los privilegiados, y se cumplan inexorablemente las realidades del antiguo mensaje de Belén renovado en los ideales del Justicialismo Peronista: 
Que haya una sola clase de hombres, los que trabajan; 
Que sean todos para uno y uno para todos; 
Que no exista ningún otro privilegio que el de los niños; 
Que nadie se sienta más de lo que es ni menos de los que puede ser; 
Que los gobiernos de las naciones hagan lo que los pueblos quieran; 
Que cada día los hombres sean menos pobres y 
Que todos seamos artífices del destino común” 
Eva Perón, del “Mensaje de Navidad” de 1951. Militante revolucionaria, esposa del Presidente Juan Domingo Perón, Argentina.